Calzado de seguridad en náutica y automoción

Calzado de seguridad en náutica y automoción

En los sectores de la náutica y la automoción, los trabajos de pintura, reparación y mantenimiento exigen altos estándares de seguridad. Estos entornos presentan una serie de riesgos físicos, químicos y ambientales que deben ser gestionados adecuadamente para proteger la salud del trabajador. En este contexto, el uso de zapatos de seguridad adecuados no es solo una recomendación, sino una medida de prevención fundamental.
A continuación, resaltaremos la importancia del calzado de seguridad en estos sectores específicos, detallando los riesgos comunes y presentando soluciones adaptadas a cada entorno.

Riesgos laborales específicos en náutica y automoción

Las actividades técnicas que se realizan en embarcaciones y vehículos, desde la reparación de motores hasta la aplicación de pintura industrial, suponen la exposición a múltiples peligros. A continuación, se detallan los más frecuentes:

1. Derrames de productos químicos: Disolventes, pinturas, aceites y otros compuestos pueden provocar quemaduras o irritaciones al contacto directo, además de generar superficies resbaladizas.
2. Caída de herramientas o piezas pesadas: En los talleres mecánicos o navales, es común el uso de herramientas manuales o piezas metálicas que pueden impactar directamente sobre los pies.
3. Ambientes húmedos o mojados: En embarcaciones, la humedad constante incrementa el riesgo de resbalones y caídas.
4. Riesgo eléctrico: Algunos entornos combinan humedad y equipos eléctricos, elevando el riesgo de descargas.
5. Espacios reducidos: Las tareas de inspección o reparación pueden implicar posturas incómodas o movimientos en espacios cerrados, lo que requiere calzado ergonómico y flexible.

Estos riesgos hacen que la elección del calzado de seguridad no pueda dejarse al azar. Debe tratarse de un equipamiento diseñado específicamente para este tipo de contextos.

¿Qué características debe tener el calzado de seguridad en estos entornos?

El calzado de seguridad profesional debe cumplir con la normativa EN ISO 20345, que establece requisitos mínimos de resistencia, protección y ergonomía. Sin embargo, en sectores como náutica y automoción, es necesario ir un paso más allá.

Características esenciales:
- Suela antideslizante (SRC): Fundamental para evitar caídas en suelos mojados o grasientos.
- Resistencia a hidrocarburos y disolventes: Las sustancias químicas presentes en estos entornos pueden deteriorar materiales convencionales.
- Puntera de protección (acero o composite): Para resistir impactos por caída de herramientas o piezas pesadas.
- Plantilla anti perforación: Protege frente a objetos punzantes en el suelo del taller o cubierta.
- Aislamiento eléctrico: Especialmente importante en tareas que implican conexión con maquinaria eléctrica.
- Ergonomía y comodidad: El calzado debe adaptarse al movimiento constante y a jornadas prolongadas.

Nuestra recomendación de calzado profesional

En Anicla, recomendamos utilizar calzado especializado y de calidad como es el calzado de seguridad Dunlop Flying Arrow S3, diseñados para ofrecer una protección integral sin sacrificar comodidad ni movilidad. Modelo disponible en dos colores: Navy y Negro, para adaptarse tanto a preferencias personales como a códigos de vestimenta del entorno profesional.

Entre las características principales de este calzado destacan: 

- Clasificación S3, ideal para entornos de alto riesgo.
- Suela antideslizante SRC, excelente agarre en suelos mojados o grasientos.
- Puntera de protección resistente a impactos.
- Plantilla anti perforación, perfecta para talleres mecánicos o zonas industriales.
- Diseño tipo deportivo, que mejora el confort en jornadas largas.
Gracias a su versatilidad, los Dunlop Flying Arrow S3 son una opción adecuada tanto para técnicos en automoción como para operarios en cubiertas náuticas o espacios con alta exposición a líquidos y sustancias químicas.

Complementos: cubrezapatos de seguridad

Existen contextos dentro de la náutica o automoción en los que no es viable utilizar zapatos de seguridad estándar. Por ejemplo, durante inspecciones breves, visitas a zonas limpias, trabajos puntuales o situaciones donde se debe evitar contaminar el entorno. En estos casos, los cubrezapatos de seguridad representan una solución efectiva.
1. Cubrezapatos Secutex con goma elástica

- Protección básica para zonas de pintura o inspección.
- Reutilizable y fácil de colocar.
- Ideal para prevenir manchas o contaminantes ligeros.

2. Cubrezapatos Secutex con suela de PVC
- Refuerzo en la suela para zonas húmedas o químicamente activas.
- Antideslizante y resistente a hidrocarburos.
- Recomendado para tareas de mantenimiento o limpieza técnica.

3. Cubrecalzado Festool Shoe FT1
- Cubrecalzado técnico de alta resistencia.
- Fabricado con tejido impermeable y lavable.
- Opción ideal para profesionales que requieren mantener limpio su entorno de trabajo sin comprometer la seguridad del pie.
- Se adapta a distintos tipos de calzado y protege frente a líquidos, polvo y partículas sólidas.

Estos cubrezapatos no sustituyen al calzado de seguridad cuando el riesgo es elevado, pero sí funcionan como complemento indispensable en tareas puntuales, ambientes controlados o zonas limpias donde la higiene es clave.

El calzado de seguridad es una pieza clave en la prevención de accidentes laborales en sectores técnicos como la náutica y la automoción. Las condiciones de trabajo en estos entornos exigen equipamiento certificado, cómodo y adaptado a los distintos riesgos presentes.
Modelos como los Flying Arrow Navy y Negro S3, disponibles en Anicla, ofrecen una combinación óptima entre protección, diseño y rendimiento. Del mismo modo, los cubrezapatos Secutex aportan soluciones versátiles para tareas puntuales o zonas específicas.
Implementar un calzado adecuado no solo mejora la seguridad del trabajador, sino que también aumenta su eficiencia y reduce el absentismo por lesiones.

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